Dicen que “ante la ley todos son iguales” pero yo percibo que “hay unos más iguales que otros” para decirlo irónicamente, porque se actúa muy diferente cuando a la gente estafada en un Banco le roban su dinero, que cuando a un conductor le roban el carro en un parqueo, por ejemplo. Resulta que si llego al estacionamiento público pagado y no está mi vehículo porque se lo robaron, tengo derecho a cobrárselo a pesar de todos los rótulos que tengan diciendo que no se hacen responsables, lo cual es muy lógico porque yo estoy confiando en ellos el depositar mi vehículo ahí, por algo no lo dejo en la calle.
Entonces, yo deposito mi dinero en un Banco, para no tenerlo en la calle o enterrado en el patio como hacían los abuelos, y si al llegar a buscarlo se desapareció me dicen que vaya a llorar a otro lado, en palabras finas, me envían a poner la denuncia al OIJ para que busquen a los delincuentes. Es como si los del parqueo me dijeran que vaya al OIJ porque con ellos no voy a recuperar nada. Entonces podría dejar de usar los parqueos, pero muy difícil dejar de usar los Bancos, porque estar bancarizado es requisito social casi para cualquier cosa.
La otra cosa que me deja clara la responsabilidad del ente financiero es que no es estándar la cantidad de estafados comparando los de uno con el otro. Cabría preguntarse por qué en unos bancos hay menos casos que en otros muy llamativos en ese sentido. Si la falla fuera de los clientes, toda entidad financiera tiene de todo, gente estudiada o no, empresarios o asalariados, amas de casa y emprendedores, de modo que debiera ser porcentualmente en proporción con su clientela el número de afectados.
Como observación final puedo asegurar que hay clientes a los que les depositan los sustraído con una gestión del Gerente de Sucursal, no sé si por el nivel de influencia que posea el cliente, del riesgo de descrédito en que los pueda meter o si es porque en sucursales rurales se conocen todos y no es fácil llevar la carga por el chisme que corre, por ser “pueblo pequeño, infierno grande” y no quiero ni considerar que sea por alguna mano externa que aparezca intermediando, pero lo cierto es que ante algunos bancos, vuelve a quedar en entredicho eso de que todos somos iguales ante la ley.
Creo que las entidades financieras deben reponer lo sustraído inclusive retroactivamente hasta diez años atrás y si demuestran que el cliente fue el que actuó mal, entonces lo denuncien, le cobren con intereses y otras costas lo que le giraron, pero sin más excusas, es su responsabilidad por tener mi dinero para sus negocios.
Carlos Alberto Monge Zuñiga
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Creo que es diferente porque ¿como demuestro que no fui yo quien sustrajo el dinero si la transacción se hizo con mi usuario? Y a la vez ¿como demuestro que fue alguien más, incluso personas del mismo banco, como algunos intentando decir? Es muy difícil que a alguien se le sustrajese dinero de su cuenta si no es que tiene una puerta de entrada virtual, es decir acceso a un sitio web transaccional. En el ejemplo del parqueo, si pudiera el dueño del parqueo demostrar que alguien llegó con el tíquete del parqueo y la llave del carro y se llevó este, ¿tendría el parque responsabilidad?. Asumamos que alguien me robó del bolso el tiquete y la llave porque ha investigado mi vida en redes sociales y me ha seguido. Eso es lo que sucede con este tipo de estafas, los clientes estamos poco preparados para administrar nuestra seguridad como ya lo hacemos con la seguirás física: evitamos ciertos lugares, usamos candados, cerramos puertas, guardamos las llaves y los comprobantes, etc.
La seguridad de la entidad es responsabilidad de ellos, como lo harán puede ser con tecnología robusta, conocer a sus clientes, monitoreo, mejores controles, algoritmos en fin es responsabilidad de ellos y si hay maneras. Por ejemplo, si el cliente no hace transacciones muy grandes y se observa algo no usual, entonces bloquear la transacción y comunicarse con su cliente entre otras maneras. Igual en un parqueo de un comercio ellos deben instalar cámaras…, conocer a sus clientes ósea quienes son los dueños de los carros y sino detenerlos, ésto requiere un gasto grande que deben asumir para protegernos.